En el crimen organizado hay mucho estado
Resumen de ideas principales desarrolladas en la conferencia virtual “Crimen organizado y sicariato en Paraguay”, realizada por el grupo de investigadores y divulgación científica “Terere Cómplice” el pasado miércoles 9 de febrero.
La conferencia se transmitió en vivo por Facebook y contó con la exposición de la comunicadora e investigadora Menchi Barriocanal y los docentes, abogados e investigadores Jorge Rolón Luna y Juan Martens Molas.
En primer lugar, Menchi Barriocanal inició la conferencia con una exposición de antecedentes históricos de la década de 1990. Mostró algunos archivos de cuando trabajaba en “El Ojo”, una productora audiovisual dedicada a la investigación de casos de sicariato en Paraguay. Este primer momento puso sobre la mesa que los atentados y la impunidad alrededor de los crímenes de las mafias no son nada nuevo en el país.
Seguidamente, el docente Jorge Rolón Luna, mencionó que el abordaje sobre estos temas se realiza con prejuicios, ignorancia, amarillismo y mitos. Que, según las investigaciones periodísticas y académicas realizadas, en el tráfico de drogas y en todo el crimen organizado hay mucho estado y mucha política. A modo de ilustración recordó que el gral. Andrés Rodriguez era un traficante de drogas.
El investigador agregó que el crimen organizado no es solo tráfico de dogas sino también tráfico de mercaderías falsas, de armas y de personas a nivel mundial. Remarcó que el negocio de la droga ilegal porque hay sociedades con altas demandas de consumo de ciertas drogas.
Sin embargo, según su punto de vista, hay que cambiar el abordaje “prohibicionista” con que las instituciones llevan más de cien años pretendiendo combatir al crimen organizado sin logros significativos. “Si las drogas no estuvieran prohibidas, no generarían tantas ganancias y es el negocio de las drogas lo que hace disparar al crimen organizado”.
Al terminar su intervención, dijo que el sicariato es un sub producto del crimen organizado, debido a una falla multi orgánica del estado y que impacta profundamente en la sociedad marcada por la desigualdad y la exclusión.
Por su parte, el investigador Juan Martens agregó que existen mecanismos de gobernanza criminal, esto es, una serie de condicionamientos de parte de las organizaciones criminales que inciden sobre la labor de las instituciones públicas encargadas de la seguridad y la justicia. Los condicionamientos se dan a través de la violencia (amenazas, coerción, extorsiones, etc.) las cuales producen determinadas formas de vivir, de pensar y de habitar los espacios, en directa relación con la acumulación social del miedo. Agregó que el silencio es un mecanismo de subsistencia, funcional a la impunidad.
Según sus investigaciones, el debilitamiento institucional es una política intencionada que se nota a través de la reducción del presupuesto público en servicios básicos y va de la mano con un discurso cada vez más en contra de lo público, el cual busca desautorizar y desacreditar a los funcionarios públicos, dejando la cancha libre para reemplazar a las funciones del estado a los actores del crimen organizado incluyendo áreas de seguridad, salud y educación.
Por último, dijo que la transición democrática también democratizó el ámbito del crimen organizado, incorporando nuevos actores en la escena de las mafias regionales. Ante esta realidad, el abogado terminó diciendo que debemos luchar por tener mayor dignidad en el ejercicio de nuestra ciudadanía a través del fortalecimiento de las instituciones republicanas que llevan décadas de corrupción e impunidad en nuestro país.
Para ver la conferencia completa puede acceder al siguiente enlace:
https://www.facebook.com/tererecomplice
Por Ivan Britez