Decomisan más de 200 kilos de pescado en límite de zona prohibida
Más de 200 kg de pescado fresco fueron decomisados por funcionarios del Mades en plena época de veda pesquera. El procedimiento tuvo lugar a orillas del río Paraná, en el límite de la zona de reserva ictícola de la EBY.
El responsable de la oficina de Pesca del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) en esta ciudad, Adán Leguizamón, relató que el operativo contó con el apoyo de los funcionarios de la oficina central de la institución José Alfonso y Milciades Almirón. La intervención se debió a denuncias de actividad pesquera en la zona de Puerto Carrizal.
El lugar está a unos 22 kilómetros del pórtico de ingreso a este distrito por el tramo vial que conduce a San Cosme y Damián (Itapúa). A través de este sitio se puede acceder fácilmente al área prohibida para la pesca comercial y deportiva, en el brazo Aña Cua de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY).
La Ley 1378/92 declara como reserva ictícola un área comprendida de 3.000 metros aguas arriba y 3.000 metros de aguas abajo de la represa de Yacyretá. El resguardo del sitio es responsabilidad de la Prefectura Naval de Ayolas con base en un convenio con la EBY.
Los funcionarios encontraron en el sitio un campamento permanente de pescadores. Los ejemplares de las especies boga y surubí estaban ocultos entre los matorrales existentes a unos 100 metros del río Paraná, casi en el límite de la reserva ictícola de Yacyretá”, explicó Leguizamón.
Señaló que los productos decomisados fueron trasladados a la oficina regional del Mades, donde permanecerán bajo resguardo hasta que tengan órdenes de qué destino dar a los pescados.
Leguizamón afirmó que los controles continuarán durante toda la veda pesquera, que terminará el 20 de diciembre próximo.
Según las denuncias, la actividad pesquera se desarrolla continuamente pese a la vigencia de la veda. En la mayoría de los casos se realiza dentro del área de reserva ictícola de la represa de Yacyretá en horas de la noche y presuntamente con el aval de marinos.
Para ingresar a la zona vedada, presuntamente cada embarcación, equipada con potentes motores, paga “peajes” de 300.000 a 400.000 guaraníes más un ejemplar de dorado.
Fuente: ABC Digital