Tañarandy nuevamente se lució en Viernes Santo
Como todos los años, miles de personas llegaron de distintos puntos del país y el extranjero para ser partícipes de la procesión del Yvaga Rape hasta el gran retablo.
Una tradición que no pierde su atracción es la procesión de Viernes Santo en Tañarandy y este año la asistencia fue récord, doblando quizá la de años anteriores, donde 20.000 personas llegaron a la localidad misionera.
Se estima que 35.000 personas llegaron ayer a San Ignacio, Misiones, para ser partícipes de la procesión por los cinco kilómetros de tierra hasta llegar a la barraca donde está el retablo.
Más de 20.000 candiles de apepu iluminaron el Yvaga Rape (Camino al Cielo), por donde se realizó la procesión de la Dolorosa hasta la Barraca, donde todos los años se realiza la presentación de los cuadros vivientes.
Este año la innovación fue la creación de un retablo con los santos, las imágenes y las estampas donadas por las familias paraguayas, de sus propios altares, combinados con vasijas, cántaros, floreros y otras obras de cerámica, buscando poner el valor en el trabajo de los artesanos alfareros y santeros paraguayos.
DEL RINCÓN SAGRADO.
La Virgen de Caacupé, patrona de los paraguayos, fue la principal en el imponente retablo, por ser la imagen donada en mayor cantidad.
El artista plástico Koki Ruiz, propulsor de la celebración popular en Tañarandy; su hija Macarena y sus principales colaboradores optaron este año por incorporar a la celebración, la religiosidad popular del país, para que las familias se sientan parte de la celebración, donando o prestando las imágenes del rincón sagrado de sus casas para formar el imponente retablo, de once metros de ancho y nueve de largo.
También se donaron varias imágenes, como Divino Niño, San Cayetano, San Miguel, Rosa Mística, San José, Jesús Misericordioso y otros patronos de las familias paraguayas. Otra de las artistas, Macarena Ruiz, dijo que en Asunción y Misiones fueron donde más se donaron las imágenes para el retablo.
Movimiento. La procesión se inició a las 17.00, en la capilla de Tañarandy, de donde con cancioneros caminaron unos cinco kilómetros entre candiles hasta llegar a la barraca, donde miles de personas esperaban ver la función.
Para la actividad de anoche entre artistas y otros trabajaron más de 200 personas, y muchas otras en los días previos.
Cabe destacar también el desplazamiento de la Policía Nacional, Policía Municipal de Tránsito, bomberos voluntarios, ambulancias y personal de blanco, que asistieron a los visitantes.
Familias enteras, grupos de amigos y delegaciones de distintos lugares llegaron exclusivamente para disfrutar del Viernes Santo en la compañía de Tañarandy.
El movimiento fue incesante y la industria hotelera y gastronómica se vieron beneficiadas con la llegada masiva de turistas.
35.000 personas llegaron a Tañarandy, San Ignacio, para participar de la tradicional actividad de Viernes Santo.
Es la primera vez que venimos, siempre veíamos por la televisión, pero esta vez decidimos aventurarnos para llegar hasta acá; nos perdimos varias veces, pero valió la pena, es algo único todo esto. Sería bueno que la próxima pongan carteles indicadores a lo largo de la ruta para los que no conocen. Ni bien llegamos vinimos directo hasta la barraca para la procesión”.
Rocío Cardozo No tengo palabras para describir esto”. Le dije a mi mamá y vinimos en familia desde San Roque, son más de dos horas de viaje y es nuestra primera experiencia”.
“Caminamos desde Tañarandy hasta llegar a la barraca, conocimos la capilla y caminamos un poco por el barrio para conocer. No tengo palabras para describir lo hermoso que es todo esto”. Raquel Samaniego.
Fuente: Ultima Hora Digital